«Las rosas son rojas, las violetas azules, hoy es San Valentín… y te odio» Anónimo

De las creadoras de «Cómo ligarse a un runner», llega por fin la segunda parte titulada «Cómo NO ligarse a un runner» donde os contamos qué cosas NO debes hacer para encontrar pareja deportista. En resumen, esas cosillas que podemos evitar en nuestros entrenamientos y carreras para que tu tan deseado San Valentín no salga huyendo a 3’30 a la primera de cambio.

Sorprendidas Juntas Es Mejor

Que ya sabéis que no somos grandes expertas en ligar, pero si hay algo que nos caracteriza es la naturalidad en todas sus vertientes… Y diréis: «¡Eso es bueno!» La naturalidad mola, eres tú sin más y quien te quiera ha de quererte tal cual. Vale, vale, pero no estamos hablando de que cambies tu personalidad, tan solo es que evites algunos «detallitos sin importancia»… ahora veremos algunos ejemplos para que nos deis la razón.

Ejemplo 1: NO vayas con todos tus artilugios nuevos de runner profesional (sin serlo) como si fueras un escaparate de decathlon. El primer día vas con los leggings marrones de algodón y tus deportivas del plestoceno, sin reloj y con tu camiseta de «Bar Manolo». Al día siguiente, para impresionar, apareces con las zapatillas más caras del mercado, un modelito fosfi y un reloj que valen más que tu coche. Eso NO mola 😉

Ejemplo 2: Quieres darle conversación, contarle todo lo «guay» que eres y además quieres entrenar a su vera para demostrarle lo que eres capaz de hacer. Compartir sufrimiento une mucho, tienes razón ¡jejeje! Si su ritmo es más tranquilo puedes adaptarte, pero como vaya más que tú y tengas que apretarte las tuercas ¡cuidadín! Una lipotimia no es nada sexy amigas ¡jajaja!

Ejemplo 3: En este ejemplo las personas delicadas no hace falta que sigáis leyendo… Porque lo de sonarte los mocos en la manga de la camiseta o escupir mientras corréis juntos… no se puede justificar ¿verdad? ¡jajaja! Es totalmente «evitable» con un pañuelo de papel guardado en tus nuevas mallas de runner, que para eso las hacen con bolsillos 😉

Lanzando ropa pantalones al aire Patri y Paula Juntas Es Mejor

Ejemplo 4: No es necesario hablar de fartlek, interval, umbrales, etcétera si no tienes ni idea. Si lo haces sin saber, cuando te pregunten algo tipo: ¿y tú… a cuántas pulsaciones entrenas? se te verá el plumero. En cambio, puedes preguntar y dejarte asesorar. Al día siguiente le puedes decir que has seguido sus consejos 😉 La curiosidad sí que mola.

Estudiando entrenamiento Juntas Es Mejor

Ejemplo 5: No la líes con comentarios tipo: «No me puedo creer que tú vayas a correr un Maratón» o «Madre mía…¿vas a madrugar otra vez este finde?». Y por supuesto no digas «Voy a correr un Maratón con mi vecina este domingo» cuando lo que haréis son 5 kilómetros (aprendedlo a fuego que eso NO es un maratón). Quieres que se ría contigo, pero no así.

Paula riéndose de Patri Juntas Es Mejor

Eso sí, empieza a buscar repertorio de cosas positivas, empaparte todas las revistas de running y olvídate de los cubatas de sábado noche porque en este mundillo se queda a «rodar» un rato a cualquier hora… y luego ya veremos.

Si, a pesar de todo, le gusta tu ropa fosfi, le hacen gracia tus comentarios y te acompaña a casa después de la lipotimia es que le molas seguro. Si además de todo eso se pone tu camiseta… es el amor de tu vida 🙂

Viz y Javi Ekiden Camiseta Juntas Es Mejor

Así que para ligar y para entrenar

siempre muestra tu mejor sonrisa

y los resultados llegarán solos 🙂

Juntas Es Mejor 

Patri y Paula Gala Fiesta Voluntariado Juntas Es Mejor