“Cuando encuentras la paz dentro de ti mismo, te conviertes en el tipo de persona que puede vivir en paz con otros” Peace Pilgim

Nosotras, que no somos muy de parar quietas, cuando nos hablaron por primera vez del yoga pensamos: ¿Relajación? ¿Respiraciones? ¿Hacer un nudo con tu propio cuerpo sin que te entre la risa? ¡Eso no es lo nuestro!

Pero claro, de repente te enteras de que la palabra YOGA viene del sánscrito y significa “unir” o “juntar”. No nos digáis que eso no es una señal ¡jajaja! Ellos hablaban de unir en perfecta armonía cuerpo y mente, en resumen… un «Junt@s Es Mejor» 🙂

IMG-20170409-WA0036

Así que con esto de las modas de hoy en día (y a nosotras que nos gusta reinventarnos y aprender constantemente) decidimos probarlo a ver si conseguíamos encontrar nuestro “equilibrio interior”.

Porque sin duda, lo primero que te dicen los expertos (también llamados yoguis) es que vas a lograr una graaaaaan paz dentro de ti.

CYMERA_20170920_132438

De lo que no te hablan es de los sudores que sufres intentando ponerte el pie detrás de la cabeza mientras la monitora susurra los ejercicios y suena música de pajaritos de fondo. De las agujetas del día después ni hablamos… nada comparado a correr 3 maratones seguidos… ¡jajaja!

CYMERA_20170920_132642.jpg

Y sin saber cómo le acabas cogiendo el gustillo, porque realmente tiene muchos beneficios comprobados tanto a nivel físico como mental. Mejoras tu flexibilidad y tu postura corporal, cualidades físicas muy importantes para prevenir lesiones y trabajar la técnica deportiva. Además, estimula la relajación, mejora la concentración y ayuda a conciliar el sueño. En definitiva… ¡¡el yoga molaaaaaa!!

CYMERA_20170920_165353

Como sois muchos los que nos habéis pedido opinión, nos hemos puesto las pilas convirtiéndonos en lo que calificaremos a partir de ahora como “yoguis motivadas”.

Así que últimamente vamos introduciendo estiramientos y posturas basadas en yoga en todas nuestras actividades y entrenamientos… algunos ya nos habéis sufrido ¡jejeje!

img_8531
DSC_0478

Así que ya podéis empezar a introducir algunas asanas a partir de ahora en vuestras propias sesiones de entrenamiento:

Puedes incorporar pequeñas rutinas al despertarte que te ayudarán a activar el cuerpo y la mente, porque las posturas de yoga, como no te concentres… ¡No las haces ni «pa atrás»!

IMG_7287

Es por eso que, a la fuerza, trabajas la concentración, la conciencia de tu propio cuerpo y hasta descubres que hay músculos que no sabías ni que tenías.

CYMERA_20170920_132612

También hay otro concepto que va muy unido al yoga que es la meditación. Nosotras estamos en ello, pero no te preocupes si por tu cabeza pasan mil cosas cuando intentas meditar. No es cuestión de poner la mente en «blanco» ni de alcanzar un «estado zen máximo».

Comienza por intentar tener conciencia de tu respiración algunos minutos, prueba simplemente a estar «presente» contigo mismo.

CYMERA_20170920_165315

Ponle ganas, ilusión y constancia.

La flexibilidad ya la irás ganando poco a poco.

Y descubre el «yogui motivado» que hay dentro de ti 😉

Juntas Es Mejor

CYMERA_20170924_185522.jpg