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“La piel se arruga, el pelo se vuelve blanco, los días se convierten en años…

Pero lo importante no cambia; tu fuerza y tu convicción no tienen edad.

Tu espíritu es el plumero de cualquier tela de araña.

Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida.

Detrás de cada logro, hay otro desafío. Mientras estés vivo, siéntete vivo.

Si extrañas lo que hacías vuelve a hacerlo. No vivas de fotos amarillas…

Sigue aunque todos esperen que abandones.

No dejes que se oxide el hierro que hay en ti.

Haz que en vez de lástima, te tengan respeto.

Cuando por los años no puedas correr, trota.

Cuando no puedas trotar, camina.

Cuando no puedas caminar, usa el bastón.

¡¡¡Pero nunca te detengas!!!”

Madre Teresa de Calcuta

Dicen que el tamaño no importa… Pero lo que realmente no importa ¡es la edad! ¿Qué más da si tienes 5 que 15 que 30 que 70?

Y es que todos hemos conocido gente más mayor pero con espíritu joven y gente joven que parecen… abuelos cascarrabias.

Lo que está claro es que la edad no está en los años que cumples, no la marca tu carnet de identidad sino tu corazón <3 Todo depende de la actitud y las ganas con las que afrontas la vida.

No consideremos la edad como un hándicap que nos impide hacer lo que nos gusta. No te olvides que para oxidarte ya tendrás tiempo y, además, nunca es tarde para empezar 😉

Puedes encontrar mil excusas, mil motivos para no despegar, pero que la edad no sea la causante de tu estancamiento.

Muchas veces, conforme nos hacemos mayores, perdemos esa vitalidad, esas ganas de experimentar, de emocionarnos, de ser espontáneos que tienen los jóvenes.

Y es que la edad y la vida, en ocasiones, nos hacen sumar también decepciones, malas experiencias… en resumen… cargamos mochilas emocionales de esas que hacen que el miedo a volver a sufrir aparezca por una ventanita de tu corazón.

Pero no tenemos edad de quedarnos con las ganas. De pensar ¿qué habría pasado si…?

Porque el tamaño de tus sueños, de tus ganas y de tu corazón ¡¡claro que importa!!

¿Cuántas veces nos ha pasado por la cabeza empezar algún deporte y nunca nos atrevemos a tirar “palante”? ¿Por qué no intentas retarte tengas la edad que tengas?

¡Sal a moverte! ¡Sal a sentirte vivo! Tú decides si sigues cumpliendo años o te dedicas a cumplir sueños a partir de ahora.

Por eso, cada vez que tenemos quedada, nos encanta comprobar que venís personas de todas las edades, de todas las condiciones físicas,… pero con una misma actitud.

Ayer volvimos a estar en Elche y fue increíble disfrutar de un rato de actividad física donde los más pequeños se integraron con gente mayor bailando, saltando y jugando como si el tamaño (y la edad) realmente no importara.

Nos hace felices que vengáis hasta tres generaciones de una misma familia a compartir estos ratos llenos de vitalidad y espíritu joven. Gracias por aguantar el calor y las sentadillas con nosotras ¡jajaja! ¡Sois pura vida!

Y, si algún día vuelven a aparecer los miedos y las dudas por una “ventanita”, piensa en todas las demás cosas (y personas) que llenan tu corazón cada día.

Piensa en todo lo que hace que te sientas vivo y haz que sea más y máaaaaaaas grande.

“Cualquiera que deje de aprender es viejo, ya tenga veinte u ochenta años. El que sigue aprendiendo sigue siendo joven.” Henry Ford

Suma años, experiencias y gente bonita a tu vida.

Suma, sigue y sonríe.

Juntas Es Mejor

PD: Gracias Xexu por ser tan especial y hacernos fotos tan bonitas 🙂